Brais Vilasó
Google
No me suelo tomar el tiempo de escribir malas reseñas, pero creo que es la función de cada uno de los seres humanos dejar el mundo siendo un lugar mejor, y quisiera ahorrarle la mala experiencia a otras personas, pero sobre todo y con suerte invitar a reflexionar a los propietarios de este local.
Acudí a los Almacenes, bajo recomendación y con una idea muy clara de lo que iba a buscar. Sí, lo que iba a buscar lo podía encontrar en otros muchos sitios y seguramente a precios más baratos pero mi idea del mundo me hace querer invertir en el tipo de locales que pensaba quería que siguiesen existiendo.
Consulte la sección de cortinas, en la que una señorita, muy simpática me atendió. Después de hacer mi recado me di un paseo por la tienda y baje a la planta de abajo donde la persona que me acompañaba (que no habla español) saco una foto a un panel de corcho. La señora, adivino la dueña de la tienda, llamó su atención de muy malas maneras a lo que yo respondí diciendole que 1) no hacia falta gritar 2)si no se pueden hacer fotos deberia de poner un carte que indique que no se pueden hacer, como se hace en TODOS SITIOS y yo respeto a raja tabla 3) intento defenderse apoyada por una clienta arrogante y maleducada además de increiblemente ignorante que empezó a lanzar comentarios racistas al grito de "hoy en día todo lo copian los chinos". Por información ninguno de nosotros somos de origen asiático.
Me da pena decir esto, pero desde luego este negocio parece ir en contra de un mundo capitalista donde la tradición reina, pero les diré que actitudes como las suyas no hacen más que alimentarlo. La tradición empieza por las maneras y las suyas dejan mucho que desear. Lo que usted ofrece se encuentra en 1001 sitios. Ha perdido un cliente que soy yo, que le iba a hacer un pedido que podríamos definir como considerable (dos hoteles para ser exactos) por su mala educación.
Debería de replantearse su modelo de negocio. No era mi caso, pero una foto en una determinada red social puede significar la supervivencia de su negocio. La tradición, nunca ha existido sin evolución y si no ha aprendido esto, se ha perdido un capitulo de la historia.