Antonio
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No quisieron darnos habitación cuando teníamos la reserva porque misteriosamente la caldera de todo el hotel dejó de funcionar. Éramos los únicos huéspedes (o de los pocos) que estábamos allí y nos hizo sospechar que quisieran cerrar porque no les saldría a cuenta mantener al personal para tan pocos clientes.
Nos avisaron durante la tarde, cuando estábamos en pista, diciéndonos que teníamos que cambiarnos a un hotel que habían buscado y, para colmo, donde nos trasladaban no tenía parking, por lo que tuvimos que buscarnos la vida con el coche.
Viendo lo poco fiables que son, no repetiría. Si de verdad la caldera se rompió (y viendo las reseñas que veo por aquí) tampoco me extrañaría, por las condiciones en las que está el hotel.