Rey Sagrado
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Inma se dedica en cuerpo y alma a que en su negocio quede bien reflejada su esencia y creencia: que las cosas bien hechas partan de numerosos pequeños detalles que, juntos, correctamente unidos, conformen un precioso, vistoso y, por qué no, lujoso resultado; su "Posada La Desmera" es el ejemplo perfecto de ello. Después, la recompensa a tan entregado trabajo parte de la sonrisa satisfecha del huésped que lo valora. Además, Posada La Desmera se sitúa, privilegiada, en la parte más elevada de Isla, precioso pueblecito a apenas cuatro kilómetros de playas. Cuenta con piscina climatizada, aparcamiento y gran espacio exterior de ocio para niños, amén de bañera de hidromasaje en las propias habitaciones. Ah!, y también hablar de sus desayunos: abundantes, variados y exquisitos. En fin, altísimamente recomendable.