El Asador de Abel - Casa Farpon

Disfrutamos del menú largo en El Asador de Abel, y fue una experiencia muy agradable. La calidad y el sabor de los platos fueron excelentes en su mayoría, con productos bien elaborados y presentados con mimo. Destaco especialmente el ambiente acogedor del lugar, perfecto para una comida especial. La mayoría de los platos nos sorprendieron gratamente, sobre todo el Pixín que estaba de muerte. Personalmente los callos y el postre de tarta de chocolate no estuvieron a la altura del resto del menú para nuestro gusto. Sin embargo, la experiencia en conjunto fue fantástica, y salimos muy satisfechos. Sin duda, es un lugar al que volveríamos por su excelente servicio y la calidad de su propuesta gastronómica.

Muy buena experiencia culinaria! Hicimos el Menú Largo como regalo de mi familia y fue completo, abundante y especialmente sabroso. La comida es de buena calidad y la materia prima está muy bien tratada. Definitivamente recomiendo el restaurante.

Una experencia extraordinaria. La verdad que Javier Farpon no defrauda. Ya éramos clientes de su anterior restaurante. La atención del personal desde que entras en el local es un trato familiar, amable y sobre todo muy profesional. Local amplio y acogedor. Las Croquetas cremosas de Jamón como siempre de 10. El torrezno confitado y frito con Limón Asado muy bueno. Probamos la Tortilla de Bacalao con su Pil-pil y Piparra y a sido un plato que nos gustó muchísimo. Pedimos un chuletón de Raza Frisona de kilo y medio 20/30 dias, y espectacular. Zona amplia para aparcar. Muchas gracias por la experiencia a Javier y su equipo. Un abrazo desde Pola de Lena

A unos 20 kilómetros de Gijón, en un lugar con un nombre tan pintoresco como "la revuelta el coche", llamado así, porque en sus orígenes fue un mesón caminero donde los coches, primero de caballos y luego de gasolina, iban, paraban y volvían por donde vinieron, se encuentra @elasadordeabelcasafarpon . ¿Pero por qué de Abel, si Abel se jubiló y ahora oficia aquí el Chef Javi Farpón? Pues por respeto al hostelero que le entregó el testigo del restaurante tras 24 años en sus fogones. . Estos chascarrillos nos hablan de historia y tradición, que es precisamente lo que se respira tras traspasar las puertas de este Mesón. . Aquí encontraréis guisos asturianos y una parrilla, a la vista del comensal, de donde salen carnes de calidad y frescos pescados, cocinados lo justo para no estropearlos. . Lo ideal es empezar pidiendo que Juan Luis @sumillermurcia te prepare un aperitivo, un negroni o un bloody mary, y para acompañar un plato repleto de sus fabulosas croquetas de jamón, suaves, con una fritura perfecta y una bechamel que te hará salivar, o unos jugosos torreznos. . La tortilla de bacalao con su pil-pil también es imprescindible, así como su fabada asturiana, de la que se puede pedir un cuenquito, para no llenarse demasiado. Otro plato mundial es el roast-beef, acompañado del mejor parmentier que recuerde haber probado. . Terminamos con dos chuletas a la brasa con diferente maduración, de 30 y 60 días, para intentar apreciar las diferencias. Curiosamente triunfó la menos madurada, más sabrosa y jugosa que la otra. . Y de postre no puede faltar el mantecado "Anglirú" flambeado al momento, la versión astur del suflé Alaska. Magnífico. . En el apartado líquido, hay que ponerse en manos de @sumillermurcia quien nos dió toda una lección de vinos asturianos, empezando por una sidra achampanada fantástica, y continuando con varios vinos de Cangas de pequeño productor, que nos dejaron locos. . Un mesón acogedor con una cocina que sublima el producto y una bodega  fuera de serie: un restaurantazo. Si viajan a Gijón, no se lo pierdan.

Primera visita al Asador de Abel - Casa Farpón, y definitivamente no será la última. Comida excelente acompañado de un servicio exquisito. Super recomendables los torreznos, la picaña y el chuletón de vaca frisona, superando ampliamente nuestras expectativas. Volveremos!

Gracias a la camarera que nos tocó y más profesional no se puede ser,pero luego los detalles que vi,como las croquetas calientes por fuera y frías por dentro,unvermut servido en esa taza,los precios desproporcionados,antes me parecía todo mucho mejor,no me gusto

Buen restaurante, buena calidad y buena atención, no es un sitio barato, pero la calidad es buena , en este caso comimos un pixin a la brasa con ensalada y una chuleta de vaca frisona con patatas y pimientos, ambos alimentos bien cocinados y de postre un arroz con leche casero , no es para todos los días , pero si para darse un capricho, si la ocasión lo requiere .

Comida rica y bien elaborada con un servicio muy bueno. Pero lo mejor es dejarse aconsejar por su personal a la hora de pedir.