Hikari Japanese Roots

Gracias por hacer de un acto tan mundano como es el comer, un placer único❤️ Anoche hicieron magia o por lo menos en nosotros. Muchas veces la rutina, la vida, los problemas y el agotamiento de vivir en un mundo que va cada vez más deprisa, hace que te distancies de disfrutar de momentos y vivir experiencias con quienes amas o quieres. Fuimos a cenar a este magnífico y exclusivo restaurante. Les estamos muy agradecidos porque en nuestra cena conectaron con todos y cada uno de nuestros sentidos gustativos y emocionales. La comida es simplemente perfecta, tiene sabores únicos e irrepetibles....platos cuyas presentaciones son inmejorables. Disfrutamos con cada uno de los platos que iban trayendo como si se tratara de un baile de sabores, a cual mejor y más rico! ❤️FELICIDADES EQUIPO❤️

La experiencia sin duda merece la pena vivirla si tienes la oportunidad, pero a mí me parece que cuenta con un precio excesivo para lo que se ofrece, por lo que no lo repetiría, de ahí la valoración. El servicio es cercano y agradable y el producto que se sirve se siente y se nota de calidad, pero personalmente me faltó algo de cocina o innovador que me sorprendiera y me hiciera sentir que el precio merecía la pena. Aún así, les deseo lo mejor con este reto, que por ahora por lo que parece, está funcionando fenomenal.

A pesar de la calidad del producto, el precio es elevado tanto para la cantidad como para la sorpresa al paladar (100€ menú san Valentín). Comparándolo solo con otros menús omakase, tanto la innovación como la cantidad se quedaron por debajo (al margen del precio) El ambiente del local es maravilloso y se puede tener una comida/cena muy relajada, con buena música ambiente, poca gente y poco ruido. El servicio es bueno, pero a pesar de que dan la explicación correspondiente del plato, nos faltó algo más para hacer la experiencia más completa y entender las curiosidades de la complejidad de las elaboraciones, de la obtención del producto o de los motivos detrás del precio. Muchas gracias por todo!

Una experiencia única! Sin duda un lugar para repetir. El servicio y atención de David y los camareros, el ambiente… lo hacen una experiencia maravillosa. La comida inmejorable, el menú elaborado en directo y con productos de calidad no dejan indiferente a nadie. No dejen de probar la carrillera, brutal también. El quesillo, receta de su abuela con jengibre todo un descubrimiento.

No es la primera vez que probamos un menú elaborado por el chef. Siempre opta por productos de muy buena calidad. El entorno es muy tranquilo y el trato personalizado. Creo que la opción de comer en barra es fantástica. En cuanto al producto, decir que es escogido con mucho mimo y de primerísimas calidades. Opta por dar más protagonismo al producto en sí en vez de añadir mucha mezcla de sabores. A veces, menos es más. Recomiendo probar las carrilleras que están fuera de carta. Sobretodo, para aquellos que tienen un gran apetito o simplemente no quieren dejar de probar ni un solo plato. Una lástima las largas listas de espera pero , por otro lado, es sinónimo de que las cosas se hacen bien.

Es un gustazo!! La comida es genial, se nota la grandisima calidad, totalmente insuperable! El chef es un artista, con claros conocimientos de la comida tradicional japonesa, y los camareros encantadores. Totalmente recomendable. Yo volveré seguro!!

Ha sido toda una experiencia. Producto de calidad, en un menú degustación que no te dejará indiferente. El maridaje también está a la altura de cada pase y recomiendo ampliar el menú, es todo un espectáculo.

Restaurante japonés de alta calidad que impresiona desde el primer momento. El chef David logra fusionar a la perfección la tradición con la innovación en cada plato. La atención al detalle y la presentación son impecables, y el servicio, siempre atento, completa una experiencia gastronómica de primer nivel. Sin duda, un lugar imprescindible para los amantes de la buena comida japonesa.