El Celler de Ca La Quica

El local es simplemente único. Techos abovedados, varios salones y una bodega preciosa repartida en varias zonas. Dispone de una carta (Domingo) con Carpaccios de pescado entres otras cosas, todos platos fríos, segundos de pescado y carnes. En mi caso quería algo caliente (Noviembre) de primero y como no tenían. El responsable lo solventó con una sopa con Wan Ton de cerdo y gambas. En general muy bien aunque deberían de ofrecer plato caliente tipo "sopa o escudella" que si se que lo tienen en el menú entre semana pero cojea en carta. Lo recomiendo a todo aquel que baje de la zona de la Cerdanya y quiera hacer una parada a medio camino.

El passat 14 de gener vam anar a dinar al El Celler de Ca la Quica a Puig-reig. El vam localitzar buscant a la guia Michelin 2023, un lloc per dinar que ens quedes a mig camí de tornada cap a casa, després d’haver passat un llarg cap de setmana per Cardona i Berga. La ubicació en un antic celler, condiciona tant l’accés com la llum i la ventilació del restaurant. L’entrada no augura per res el que et trobaràs després. El menjador es reparteix en diferents sales de reduïdes dimensions i sorprèn que sigui tant fosc, excessivament fosc, sobre tot al arribar, acostumats a la claror del carrer. Una mica mes de llum seria d’agrair i de fet ens van portar una llum portàtil per sobre de la taula. El que prometia ser un “fosc dinar” es va il·luminar de cop en el precís moment que vàrem començar a menjar. Un autèntic festival en el que vam gaudir molt de tots els plats. (Pernil de gla, calamarsets a la planxa amb cansalada de gla i pèsols picants, i costella glacejada, . . .) Com després havíem de agafar el cotxe, no vam explorar el celler i vàrem seguir tot el dinar amb el mateix cava que ens van oferir d’entrada. Menjar tradicional sense grans manipulacions amb productes excel·lents i tot això a un preu molt raonable. Restaurant moooolt recomanable.

Un singular restaurante en medio de Puig-Reig, con una cocina de gran calidad. Platos muy bien elaborados y con buenos ingredientes. Algo lentos para empezar el servicio, pero una vez arrancan, son diligentes. Tienen un buen pan, y una bodega con muchas opciones aptas para todos los gustos y bolsillos. El restaurante tiene lugares con encanto, e invita a una sobremesa con alguna de su selección de espirituosos.

Pequeño pero gran restaurante, bonito, tranquilo, con rincones bodegueros preciosos, fantástico para ir en pareja a disfrutar de una gran cocina. Todo lo hacen al momento, quizás por eso los platos no salen seguidos pero no importa ya que lo bueno se hace esperar, precios acordes a la calidad y muy buen trato. En temporada puedes degustar de las setas de proximidad. Llamar antes para reservar. Que lo disfrutéis.

Hermoso lugar en Puig reig, a 55 minutos de Barcelona, un celler de guía michelin. Nos han recibido muy bien, por no decir que nos han abierto el restaurante para nosotros. Nos han abierto sus bodegas con una gran colección de vinos. Hemos comido como nunca y descubrimos muchos sabores nuevos de la tierra. Hemos conocido a Toni Castaño. Volveremos seguro.

La comida exquisita y los platos muy bien presentados cuidando de cada detalle. El servio muy correcto y bueno. El ambiente muy íntimo y agradable. Volveré a ir seguro.

Precioso restaurante dentro mismo de la antigua bodega. Trato inmejorable tanto por parte de la camarera como del dueño. Tienen menú entre semana y carta el fin de semana. Cocina mediterránea con toques de autor, todo estaba delicioso. De postre, obligatorio probar las trufas, espectaculares. Para escojer el vino te acompañan a la bodega y te orientan pero te dejan escojer. Repetiremos seguro.

Magnífico restaurante en el centro de la población de Puig Reig, a 70 Kms de Barcelona en dirección Pirineos.. Comida muy elaborada, de gran calidad. Titánico esfuerzo de calidad y profesionalidad por parte del cocinero y del jefe de sala. La labor comercial de este es impagable: cercano, amable, profesional y atento. La comida es un festival. Gran variedad de vinos. El ambiente del local nos recuerda a una casa rural pese a estar en el centro de la población. Se puede comer en la bodega al lado de las reservas de vino. Una magnífica experiencia con precios razonables.